Evangelicalismo en Francia
Resumen del post:
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Fecha:
29 mayo 2017, 03.52 PM
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Autor:
Paul Wells
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Publicado en:
Actualidad y Opinión
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Evangelicalismo en Francia
El protestantismo es una minoría muy marginal en Francia, numéricamente menor
al 2 % del total de la población. France Mission estima que en Francia hay 1.700.000
protestantes y 600.000 evangélicos. Esta primera imagen es generosa ya que muchas
personas se hacen llamar protestantes porque no son católicos. Simpatizan con la minoría
protestante porque ellos han llevado a la libertad de conciencia y a la tolerancia.
En la segunda mitad del siglo XX, la Iglesia Católica Romana “perdió” Francia, en
la práctica religiosa y en la disminución de los bautismos. A pesar de eso, el catolicismo
sigue teniendo un peso cultural en la sociedad; si tu dices que eres “cristiano”, eso se
entenderá como católico romano.
Protestantismo
Durante este mismo período, las iglesias protestantes han sufrido un comparable
declive, socavado por el secularismo y el ecumenismo. En este sentido, la minoría
protestante en Francia se adaptó a la mayoría, en lo social y religioso, y al hacerlo perdió su
alma a través del compromiso con el humanismo y con el catolicismo. La pérdida de
identidad doctrinal y la ausencia de un mensaje claro, constituye una amenaza para la
supervivencia de las iglesias protestante tradicionales, luteranas o reformadas. La
conformidad con las presiones sociales de la mayor iglesia protestante histórica (Iglesia
Protestante Unida, formada por la Iglesia Reformada de Francia) al adoptar el “matrimonio
entre todos”, incluyendo al pastorado.
En la última mitad del siglo, en contraste, iglesias evangélicas han crecido de
manera alentadora. Desde hace cuarenta años asisto a la convención anual de iglesias
evangélicas (Centro Evangélico) en Nogent, cerca de París. Asisten 60 personas
aproximadamente. Este año se esperan 2.000. El tema es “Tomar la Escritura en su
palabra”. En otra instancia: En el último invierno, el Instituto Bíblico de Ginebra organizó
un conversatorio de la Coalición Francesa por el Evangelio, con expositores de Estados
Unidos. Hubo entre 600 a 700 asistentes, la mayoría de ellos eran jóvenes que disfrutaron
cantando “Townend and Getty” en francés.
El Consejo Nacional de Evangélicos de Francia (CNEF), fundado en el 2003,
calcula que, de las 2.068 iglesias evangélicas que hay en Francia, alrededor de la mitad
fueron plantadas en los últimos 30 años. He oído que se planta una nueva iglesia por
semana, pero no hay manera de verificar esta información.
CNEF
¿Cuáles son las razones de este sorprendente desarrollo? Una razón es la existencia
de la CNEF, que hasta el 2016 estaba compuesta de 30 denominaciones distintas, más un
número de trabajos para-eclesiales. Ella incluye iglesias pentecostales y carismáticas, así
como grupos evangélicos más tradicionales. Obviamente esto puede producir tensiones a
nivel local, pero la CNEF existe para proteger los intereses de la minoría evangélica en el
espacio público. Ella tiene varios departamentos, incluyendo comisiones de asuntos legales,
éticos, plantación de iglesias y trabajo en cárceles. Hoy en día hay más personas asistiendo
a las iglesias asociadas a la CNEF que a las iglesias asociadas a la Federación Protestante
Francesa (FPF).
Esta última organización tiene antecedentes históricos e influencia intelectual en las
altas esferas, pero las iglesias que representa tienen poco interés en la fe bíblica, y su
referencia a la Reforma es tristemente más de ascendencia histórica que de convicción
teológica. Evidentemente, la FPF tiene una visión de rechazo al surgimiento del
cristianismo evangélico en Francia, que consideran “fundamentalista”.
Otra razón para el crecimiento del evangelicalismo ha sido la llegada de migrantes a
Francia durante las últimas décadas, y esto también se ve, en el crecimiento del Islam en las
zonas residenciales. Muchas de las nuevas comunidades tienen fuertes lazos étnicos y su
propio modo de culto. Hace muy poco prediqué en Angers, en el valle Loire, en una Iglesia
Bautista, para una congregación de 30 personas y que era algo así como las Naciones
Unidas, con una minoría de indígenas franceses. Esta es una experiencia común.
Otra razón que contribuye al crecimiento es el apreciable impacto de misioneros
extranjeros, no sólo de Estados Unidos y América, sino más recientemente de África, el
Caribe y Korea, a veces trabajando junto a los pastores franceses. Francia sigue siendo un
campo misionero. Es una lástima que en la “pérfida Albion”, como es conocida al otro lado
de La Mancha, sólo haya un pequeño interés, o conocimiento, de nuestro vecino más
cercano.
Literatura
Hace cincuenta años, en el mundo francófono, había relativamente poca literatura
bíblica. Con algunas excepciones, como los libros de J. I. Packer y John Stott, el resto eran
de testimonio personal. Hoy en día hay una abundancia de libros valiosos, tanto teológicos
como prácticos, y aquellos que quieren crecer espiritualmente pueden encontrar lo que
necesitan.
Europress y Excelsis han hecho valorables contribuciones; este último produce
comentarios y diccionarios teológicos. A menudo el material es traducido del inglés, y no
hay dificultad para encontrar libros en francés de Sinclair Ferguson, Tim Keller, Stuart
Olyott o John Piper.
Pero también hay una nueva generación de escritores franceses. La Institución de la
Religión Cristiana de Juan Calvino fue publicada en una traducción moderna por primera
vez en 2009 (ya que el francés antiguo era ilegible para la mayoría) y un compendio circuló
unos años más tarde. Se vendió bien entre los católicos romanos, creo. Pero algunos
evangélicos son extrañamente cautelosos con Calvino.
Sin embargo, a pesar de numerosas publicaciones, los editores franceses se quejan
de las malas ventas. Esto probablemente se deba a suspicacias sobre la “teología”, que
algunos evangélicos asocian con el liberalismo, y también porque les resulta conveniente
cultivar una dicotomía entre fe y vida, como en una sociedad altamente secular es cómodo
hacerlo.
Seminarios
Finalmente, en los años recientes ha habido un impacto de institutos bíblicos y
seminarios francófonos, con un creciente número de estudiantes. Estos últimos son la
Facultad Libre de Teología de Vaux-sur-Seine (FLTE), cerca de París, y la Facultad Juan
Calvino (FJC) en Aix-en-Provence, cerca de Marsella. En Nogent-sur-Marne, cerca de
París, hay un Instituto Bíblico; en Ginebra también; en Bélgica está el Instituto Bíblico
Belga, con un renovado vigor. Se habla de un nuevo seminario que se está lanzando en
Suiza, en el sitio del Instituto Bíblico y Misionero Emaús, pero algunos dudan de la
necesidad considerando las opciones disponibles.
¿Cuáles son las grandes necesidades de la iglesia hoy? A pesar de muchos
estímulos, la gran necesidad es que existan iglesias arraigadas en la Biblia, con una sólida
predicación expositiva y aplicación práctica. Cualquiera que sean los institutos de
formación, no parecen estar entrenando a lo predicadores; los modelos de lo que el
ministerio bíblico debe ser, son escasos. Demasiados sermones son homilías o
performances – entretenimientos cortos o largos. Cualquiera puede ver esto al mirar el sitio
web evangélico número 1: TopChrétien.
Hay dos peligros al acecho. El primero es el surgimiento del neo-evangelicalismo, a
menudo de influencias trasatlánticas, con una baja visión de la Escritura, adherente al
teísmo evolutivo y que cuestiona la expiación bíblica. El otro es el de influencias
carismáticas extremas, también del extranjero, con prácticas extrañamente animistas.
Internet promueve esas modas.
Cincuenta años después hay mucho de qué entusiasmarse, pero más por qué orar.
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Paul Wells es profesor emérito de la Facultad Juan Calvino en Aix-en-Provence (Francia).
Doctor en Teología por la Universidad Libre de Amsterdam (Holanda). En el año 2009
recibió el Doctorado Honoris Causa del Seminario Teológico Westminster (USA).
Traducido al español por Gonzalo David, con la autorización del autor.
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